encaja2 porciones

Tiempo30 minutos (más 2 horas de refrigeración)

DificultadFácil

Hora del postre: panna cotta de café

Aprenda a preparar el dulce que se ganará su paladar y deleitará a sus invitados

Si le encantan los postres que unen cremosidad y sabor, la panna cotta de café es la opción perfecta para endulzarle el día. Este manjar italiano, que significa "crema cocida", es un verdadero encanto para los amantes del café, ya que aporta un equilibrio perfecto entre la suavidad de la crema y la intensidad del café.

Con una preparación sencilla e ingredientes accesibles, podrá sorprender a amigos y familia con esta exquisitez.

¡Manos a la obra y veamos cómo preparar este dulce que promete ser la estrella de su mesa!

 

Ingredientes
20 ml de agua
4 g de gelatina sin sabor
100 ml de leche
120 g de crema de leche
35 ml de café colado
40 g de azúcar

Ingredientes almíbar
150 ml de café colado
50 g de azúcar

 

Preparación
Primero, prepare un café colado fuerte con el método de su preferencia y separe. Para esta receta, necesitará 185 ml (divididos entre la panna cotta y el almíbar). Luego, coloque agua en una jarra e hidrate la gelatina durante 5 min.

En una lechera, vierta la leche, la crema de leche, los 35 ml de café colado y el azúcar, mueva hasta que hierva a fuego bajo.

Vierta la mezcla caliente en la jarra con la gelatina hidratada y mueva hasta que quede homogéneo.
Elija 2 copas o tazas de vidrio con asa para armar los dulces. Para crear el efecto inclinado en el postre, colóquelas en un molde forrado con papel de cocina para que no se deslicen y apóyelas en un soporte, como un bowl estilo ramekin u otro recipiente pequeño. Distribuya la mezcla de panna cotta de manera uniforme entre las copas y guarde en la heladera durante 2 h.

Para hacer el almíbar, coloque azúcar en una olla a fuego bajo y espere caramelizar. Agregue los 150 ml de café colado y mueva por unos 5 min. Refrigere hasta el momento de servirlas. Retire las panna cottas firmes de la heladera y distribuya el almíbar en las copas.

Sirva inmediatamente y aproveche. ¡Ah! Los dulces listos pueden estar en la heladera por hasta 3 días, tapados con plástico o dentro de un pote con tapa.

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¡Aproveche cada cucharada y no se olvide de compartir esta exquisitez con sus seres queridos!

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